No se nos da un EGO para que lo matemos de hambre. Se nos da un EGO para aprender a mantenerlo en equilibrio, dominarlo. En muchos casos, el ego representa la Identidad : le proporciona una particularidad, una forma que es esencial para funcionar en este plano..Comprendemos con dificultad el concepto de que SOMOS PARTE DE UN TODO. Si fuéramos la verdadera encarnación de ese concepto, no necesitaríamos experimentar lecciones. El EGO nos da la identidad para experimentar las lecciones desde un punto de vista muy específico, el NUESTRO. Es como ver la situación a través de una ventana también muy específica. El marco de la ventana es "nuestro ego". Nos proporciona el formato para mirar a través de ella(desde una perspectiva muy precisa) ese aspecto de "ese problema".Es muy parecido a cuando miras al horizonte, pero sabes que hay una visión del Universo Entero. El EGO se convierte en un periscopio desde el que vemos aspectos muy específicos de ese universo. Se nos da un EGO. La recompensa llega cuando somos capaces de "dejarlo ir"...y ver la IMAGEN COMPLETA. Pero existe una forma del Ego al que yo llamo "COMPLEJO DE SUPERIORIDAD ESPIRITUAL". Todos conocemos personas con este complejo, son aquellas que para sentirse importantes deben involucrarse en cambiar algo, no por el valor "intrínseco de ese cambio en sí, sino por la "evidencia externa", con la esperanza de que sea reconocido por otros, de su efecto sobre algo para parecer "el MEJOR",SE INTENTA SIEMPRE "AÑADIR ALGO" A LO QUE YA CONOCEMOS EN SU TOTALIDAD Y PERFECCIÓN, no obstante estas personas intentan "mejorarlo",alejándose así de lo que ya es perfecto. Pero esto les es necesario para su sentido de "autoafirmación" basado en lo EXTERNO u orientado a los objetos, en lugar de estar basado en lo INTERIOR, u orientado al sujeto.
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